Los smartwatch parecen una idea excelente, pero no acaban de estar a la altura de las expectativas que despiertan sus campañas de marketing. El Pebble Steeles la excepción. Su rediseño en acero no lo hace perfecto, pero llega lejos, muy lejos.
¿Qué es?
¿Por qué es importante?
Todo el mundo está intentando fabricar no ya un smartwatch, sino EL smartwatch, y ninguno lo ha conseguido todavía. Pebble sigue siendo la mejor opción por el momento. Sus creadores no solo han demostrado cuál es el camino a seguir, sino que han conseguido algo muy difícil, perdurar más allá de una campaña exitosa de Kickstarter. Además, es el reloj inteligente más bonito que hay por el momento.
Diseño
Puede no ser el estilo que más te guste, pero es indudable que el Pebble Steel tiene estilo. El reloj es una pieza angulosa de metal, un poquito grande, quizá, pero con una estética retro que hace que se le perdone. El diseño de la esfera es sólido y elegante.
En cuanto a las correas, el Pebble Steel viene, como su propio nombre indica, con una correa metálica como la de cualquier reloj de joyería. Esta correa está disponible en dos tonos metalizados, uno un poco más oscuro que el otro. Además, la caja incluye una segunda correa de cuero negro por si se ajusta más a nuestras preferencias.
Usando el Pebble
La funcionalidad del Pebble Steel es idéntica a la de su predecesor de plástico. La mentalidad de las funciones de este reloj es la de "Menos es más". En otras palabras, que no intenta hacer de todo y quedarse a medias, sino que hace bien lo que tiene que hacer, que es dar la hora con estilo y mostrar las notificaciones del smartphone en la muñeca. Es esta simplicidad la que lo hace tan atractivo de usar.
Tu teléfono móvil recibe una notificación, pasa un segundo, miras a tu muñeca y lees la notificación o el mensaje. Ya está, y además con un dispositivo que resulta bonito de enseñar. El smartwatch funciona igual de bien en Android que en iOS, aunque los usuarios de iOS7 tienen cierta ventaja en una mayor fluidez y en una configuración que no puede ser más sencilla.
La mala noticia es que Pebble se sincroniza con el centro de notificaciones del iPhone. Esto hace que no exista un término medio en la configuración. En otras palabras, no se puede configurar una aplicación para que nos notifique solo en el teléfono. Si está activo en el centro de notificaciones, sus mensajes llegarán a Pebble. Esto puede ser un poco fastidioso de cara a la autonomía si tenemos muchas aplicaciones de este tipo activas.
En Android, la situación mejora un poco. Como la configuración de Pebble no está integrada para todas las aplicaciones, hace falta una aplicación que sincronice ambos dispositivos como Pebble Notifier. Esto se traduce en que el usuario puede definir mejor cómo quiere que se comporten las notificaciones de cada aplicación.
Durante el tiempo que pasé con el Pebble Steel, el dispositivo sencillamente se integró en mi vida de la manera más sutil y deseable posible. Después de una semana ya me había hecho con el hábito de mirar a la muñeca cuando suena el teléfono, incluso aunque no lleve el reloj puesto. Eso es algo bueno porque la tecnología funciona cuando no nos damos cuenta de que está ahí, cuando no molesta.
La tienda de aplicaciones para iOS que Pebble acaba de lanzar es un añadido positivo más a la lista de méritos de este smartwatch. La tienda permite descargar e instalar nuevas portadas para mostrar la hora, y algunas aplicaciones interesantes. Las portadas requieren de enredar un poco con la configuración, pero nada que un usuario medio no pueda hacer. La versión Android de esta tienda llegará en breve.
Las aplicaciones para Pebble son correctas, aunque no puedo evitar preguntarme para qué voy a consultar Foursquare en el reloj cuando puedo hacerlo mucho más cómodamente en el móvil.
Nos gusta
La renovada estética en metal consigue su objetivo, que es hacer que el Pebble no parezca tanto un juguete para geeks, y sea un dispositivo apetecible por alguien no tan tecnológico. Para hacer las cosas mejores, el sistema de enganche de la esfera es compatible con cualquier correa de 22 nanómetros, así que la personalización llega tan lejos como uno quiera.
Pebble ha captado la esencia de lo que debe ser un smartwatch, que es mostrarnos las notificaciones sin sacar el móvil del bolsillo. No hay cámaras casposas, ni aplicaciones que hacen su trabajo a medias. Por no tener, no tiene ni pantalla táctil, y no le hace falta. Es el mejor (por el momento) en su trabajo.
La autonomía del Peeble se mide en días. Eso es algo fundamental para que no acabemos hartos de un smartwatch. Bastante tenemos con acordarnos de cargar el móvil. Cinco días es bastante razonable y nos evita estar todo el día preocupándonos por el dichoso cargador. Por último, es sumergible hasta cinco atmósferas (50 metros teóricos), que no está nada mal. En la práctica esto significa que puedes nadar con él en la piscina, pero mejor no lo bajes a 50 metros si eres buceador.
No nos gusta
No se puede configurar cuanto tiempo queremos que duren las notificaciones en la pantalla, y el tiempo que tardan en desaparecer es quizá demasiado largo. Para quitar las notificaciones acumuladas hay que pulsar un botón, y no siempre tenemos la otra mano libre.
El Pebble puede sincronizarse con aplicaciones deportivas, pero no va más allá. Es su filosofía no hacerlo, pero con un hipotético iWatch de Apple a la vuelta de la esquina, y con las pulseras cuantificadoras asumiendo nuevas funciones, la falta de un sensor independiente es un fallo. Sobre todo para un dispositivo que cuesta 250 dólares.
Todo esto nos lleva al principal problema del Pebble Steel, un problema que tiene que ver con los largos plazos de fabricación de Kickstarter. El smartwatch es un producto con dos años y eso, en este mercado, es un producto viejo. La tienda de aplicaciones le da un poco de oxígeno, pero tampoco demasiado teniendo en cuenta que no aporta mucho a la mejor característica de este dispositivo, que son sus notificaciones.
¿Me lo compro?
Si no te importa esperar, nuestra recomendación, por el contrario, es no comprarlo. El mercado de relojes inteligentes parece próximo a un boom, tanto si eres usuario de Apple como de Android. No parece muy buena idea gastarse ahora 250 dólares en un dispositivo que podría quedar obsoleto en un plazo muy breve.
Especificaciones del Pebble Steel
- Tamaño: 52mm × 36mm × 11,5mm
- Peso: 38g / 1.34oz with standard band
- Formato de correa: 22 mm
- Pantalla: 1.26 pulgadas, 144 × 168 píxeles pantalla e-paper
- Autonomía: 5-7 días
- Sensores: Acelerómetro 3D, brújula (mediante futura actualización), Sensor de luz ambiental
- Precio: $250 dólares
Me gusta la autonomia que tiene, que aguante una semana completa y me encanta su diseño.
ResponderEliminaryo lo compro